El centro educativo público de Barbará cuelga diversos carteles instando a la discriminación lingüística en la educación
ByB
2-1-23
El colegio público Pau Picasso de Barbará del Vallés exhibe carteles públicos en los que se insta a la discriminación del español como lengua vehicular, además del catalán, en esta escuela de primaria. Los carteles están situados en diferentes lugares del colegio, y destaca uno que está colocado en el patio, de forma que pueda ser leído por los alumnos, en una clara demostración de adoctrinamiento escolar contra la lengua española. En concreto, en los carteles se puede leer el lema “Defensem l’escola en català” bajo un fondo amarillo, color habitual del nacionalismo separatista.
Esta propaganda se alinea con la política de implantación del apartheid lingüístico en las escuelas públicas de Cataluña, denominado con el eufemismo de “inmersión lingüística” por los partidarios de la imposición exclusiva del catalán. El objetivo es la analfabetización en español, parcial o total, para que los estudiantes catalanes no puedan expresarse en castellano correctamente, y así instigarles a considerar el español como una lengua secundaria y/o extranjera. Esta finalidad de analfabetización activa en español ya ha quedado explicitado, incluso, en libros de texto usados actualmente en instituciones educativas públicas como la Universidad Autónoma de Barcelona.
El colegio Pau Picasso y su directora vulneran los derechos lingüísticos de los alumnos y las sentencias del TSJC
Además de un atentado contra la libertad y los derechos lingüísticos de los catalanes, y del conjunto de los españoles, la prohibición del español como lengua vehicular en las escuelas de Cataluña es anticonstitucional, como han establecido reiteradas sentencias de los tribunales de Justicia. La última ha sido la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que ha manifestado la obligación de ofrecer, al menos, dos asignaturas troncales en lengua española.
De esta forma el TSJC obliga a cumplir la sentencia previa sobre la impartición de, como mínimo, el 25 por ciento de asignaturas en español que el mismo tribunal dictó en 2014 y ratificó en 2020. La última sentencia ha sido la respuesta a las denuncias por discriminación lingüística en la educación realizadas por la Asociación por una Escuela Bilingüe (AEB), que lleva años luchando contra el aparheid lingüístico en los colegios catalanes.
Todas estas sentencias han sido incumplidas reiteradamente por el Departamento de Educación de la Generalidad, dentro de su política de ataque sistemático a la lengua española para imponer un modelo separatista desde la enseñanza, al margen de las normas democráticas. Un incumplimiento al que se han sumado colegios públicos como el Pau Picasso, cuyo Consejo Escolar está encabezado por la directora Olga Egea.
El sistema ilegal de apartheid lingüístico escolar cuenta con el apoyo de formaciones políticas que van desde el nacionalismo socialista del PSC, a la extrema derecha separatista de Esquerra Republicana de Catalunya y Junts per Catalunya, y al fascismo violento de la CUP, pasando por el nacionalismo comunista-populista del conglomerado Podemos-Comunes-Comunistas.